Autor: Ernesto Cordero
La “recette” de Monseñor Bergoglio
Pues sí, ya están hechos. Corresponden 5 per cápita.
Del cuerpo físico, se dijo de todo a lo largo de los siglos, pudiéndose hacer
un recuento para ver qué partes del cuerpo forman “los 40 Principales” de entre
todos ellos. Pero, muy altos en el “ranking” seguro que estarían quienes,
quiénes se disputarían los primeros puestos?
A mi se me ocurre que son el Corazón, los Ojos y
las Manos.
El corazón, es invisible a los ojos y a las manos,
pero quizás por éstos en el portador, se puede saber mucho de lo que su corazón
encierra a más siempre le puede decir al escrutador o también por una
mirada, si lo está juzgando o no “desde el corazón”.
Los ojos desde luego todo lo ven, pero tienen un
hándicap: no pueden llegar a ver la totalidad del cuerpo que los acoge, aunque
es sabido que están las fotos, los espejos… que no siempre estuvieron por
cierto, pero se puede ver el firmamento y sin más, ya es mucho, aunque es una
lástima que haya tanto porcentaje de, como dice el refrán “No hay más ciego que
el que no quiere (o pueda) ver” y no sólo pasa con respecto al Cielo.
En relación al Cielo, también ocurre con las
competitivas manos. Se puede “tocar el cielo con las manos” aunque el cielo de
referencia sea un estado del Ser, no el mismo cielo ya que el hombr@ vive entre
el “cielo y la Tierra”, como dice el principio taoísta, a lo que habría
que agregar: necesitando del corazón y los ojos para estar en armonía con
ambos, que es de lo que se trata en este diario vivir, pero ahí caben también
las manos como intermediarias del mente/corazón y a partir de este par, lo que se
vé, se quiera, pueda o pudiese ver, están las manos para llegar a hacer y hasta
para “echar una mano” (que es más que una ojeada)´- aparte que por
sí solas, “las manos son la mente del cuerpo”.
Los 3 tienen preferencia también en toda relación
con “lo Alto”. Los ojos se pueden cerrar para no ver, las manos se pueden
juntar o adoptar una posición especial, entanto el mente/corazón lo quiera.
El todo muy astrológico: Sol/Luna y Mercurio. La
respiración es superlativa en toda vida humana, pero no es causa de
descripción, quizás porque se dá por obvia, salvo en los casos en que las
relaciones con “lo Alto” sea “especial”, aún entre los que son
mancos y ciegos.
Se sabe que el hombr@ ideó toda clase de
adminículos para estar en “lo Alto” predominando los sonoros y los de cuenta,
aunque a veces van unidos, pero a falta de tal, ya que no dejan de ser cosas
“externas”, las manos mismas son una especie de “prêt-à-porter” para el
viaje, son lo que tenemos “más a mano”.
Aún en estado de oración, juntas o en mudra,
tienen a más un valor terapéutico, porque llevan inscripto todo el cuerpo, pero
si te dedicas a investigar sin ir más lejos qué significa por ejemplo cada dedo,
verás que a lo largo de las tradiciones y desde diferentes disciplinas antiguas
y modernas, las manos como sujeto de conocimiento, “fueron muy tocadas” de
diferente manera, como si se tocase a un elefante, en la oscuridad!
Viene al caso la “recette” de Monseñor Bergoglio,
actual Arzobispo de Buenos Aires Es Sagitario y Quirón lo tiene en Géminis, eso
sí, casi casi conjunto a Tierra en Helio, por eso de que las manos la tradición
las ubica en Géminis: los primeros 15º, la izquierda, los restantes
15º, la derecha, y no al revés. Así lo expresa Lao-Tsé:
“El sabio en su virtud, tiene la izquierda por
lugar de honor.
Donde se encuentra el armamento, se
honra a la derecha".
“Lo agraciado viene de la izquierda, lo desgraciado
de la derecha”.
Para este rezo con las manos, no se necesita nada
especial y su condición de “listo para llevar” hace que se pueda hacer en todo
momento y lugar, incluso estando sucias o esposadas. Bastará que mente/corazón
lo apruebe. Viniendo de una jerarquía cristiana, se pensará en una
identificación con estos valores; no es exactamente el caso con la
oración de Monseñor: la pueden dar por buena los de cualquier religión o
creencia.
El pulgar, será el dedo comodín, quiere decir que
los 4 restantes de cualquiera de las 2 manos que se use, será él quien los
activará. Pero previamente, le toca su turno a él y será el dedo índice quien
lo toque en un ida y vuelta, ya que a partir de ahí, será el pulgar que seguirá
con el índice y los 3 restantes.
Se supone que Mons. rezará un Padre Nuestro en cada
toque, pero tanto la cacerola como los ingredientes son los tuyos, y puedes
meter lo que creas, la cuestión es seguir el orden… que indican los dedos.
PULGAR :
Rezo por los próximos y cercanos a nosotros:
familia, vecinos, amigos, mascotas.
ÍNDICE:
Rezo por los que enseñan, a los que podemos agregar
a todos aquellos que creemos nos han enseñado algo, sin olvidar algún elemento
de la naturaleza o a Mr Google de acuerdo a los tiempos, es el lr.
Ministro de la Sra. Educación.
MEDIO:
Rezo por las Autoridades. Lógico, ya que es el más
alto. Se tratará tanto de los que ejerzen cualquier tipo de autoridad como
aquellos que la tengan de algún tipo también sobre nosotros.
ANULAR:
Rezo por los más débiles, en cualquier nivel que lo
sean. Aquí caben todos los reinos de la naturaleza, ya que están sujetos a la
acción del hombre. Esta atribución se comprende, ya que todas las tradiciones
le otorgan inferioridad en relación a los otros. Vale agregar que son mayoría…
MEÑIQUE:
Rezo por uno mismo. En alguna parte debíamos estar
y es lógico también optar por este dedo y ponernos en último lugar,
consolándonos con que “los últimos, serán los primeros”, ya que así será porque
finalmente quienes rezamos por todos los demás, ¡somos nosotros mismos!
Amen ¡y buen provecho!